Si eres consumidor de redes sociales como Twitter, es inevitable que no te hayas cruzado con las últimas campañas de street marketing que han inundado las redes de polémicas. Entre ellas, las más sonadas han sido la de Vicio y el último golpe de Atresmedia.
Está claro que cuando una campaña de este estilo llama la atención, las redes se llenan de usuarios comentándolo, criticándolo, etc. Gracias a esto, estas campañas consiguen aún mayor visibilidad.
Recordemos de qué se trata el street marketing, ya que se trata de un conjunto de tecnologías desplegadas en la vía pública que brindan una impresión visual atractiva y una experiencia de usuario durante un período de tiempo. Facilita la interacción con los transeúntes, permitiéndoles desarrollar una conexión emocional con la marca y sentirse parte de la marca. Es probable que tales tácticas atraigan la atención del público y, por lo tanto, se difundan a través de las redes sociales, pasando de un movimiento local a un movimiento general.
Cabe señalar que este concepto está muy relacionado con otras dos estrategias que no deben confundirse. Uno es el marketing de guerrilla, una apuesta por la actividad creativa y no convencional que no necesariamente tiene que hacerse en la calle. De esta forma, el street marketing puede considerarse un aspecto del marketing de guerrilla. Otro es el marketing ambiental. Una vez más, no es exclusivo de la calle, pero puede resultar confuso cuando estás en ese entorno. La diferencia es que el street marketing cambia el espacio o añade nuevos elementos, mientras que el marketing ambiental utiliza la disposición del entorno para transmitir un mensaje de una forma más sutil. Sigue leyendo sobre el street marketing en nuestro blog.
Las campañas que hemos señalado anteriormente, podríamos considerarlas dentro de la categoría de marketing de guerrillas. El marketing de guerrilla tiene como objetivo mantener su memoria en la mente de los consumidores. Se diferencia de otras estrategias de marketing porque busca lograrlo a través de acciones innovadoras y con capacidad de difusión. Además, implica muy poco dinero de inversión, por lo que es una muy buena estrategia para empresas más pequeñas que no pueden permitirse grandes inversiones.
Por otro lado, así como no requiere una gran inversión de dinero, sí requiere una inversión de ingenio y creatividad. Captar y atraer la atención de la gente no es fácil, requiere mucho trabajo y muy buenas ideas, pero a la larga vale la pena.
Ejemplo de ello son estas campañas realizadas por Atresmedia y Ganas de Vicio. Aunque cabe señalar, que encontramos otros muchos ejemplos de street marketing que han resultado un gran éxito.
La cadena de hamburguesas de Barcelona en Septiembre de 2022, inició una campaña junto con la modelo Jessica Goicochea, para promocionar su cadena y anunciar la apertura del nuevo local en Madrid.
Esta campaña provocó un gran revuelo en la Comunidad de Madrid, además de incendiar las redes sociales aplaudiendo la estrategia. En la que claramente, se produce un guiño a uno de sus competidores: la cadena de hamburguesas de Goiko Grill.
Mediante ese juego de palabras y una pancarta de grandes dimensiones colocada en pleno centro de Madrid. Una pancarta que ha marcado tendencia y un gran ataque para su competencia. Un post de instagram que acumula 33.000 likes y 120.000 seguidores.
El grupo Atresmedia ha lanzado una campaña de comunicación dando la bienvenida a todos aquellos que están descubriendo ahora la televisión.
Con una pancarta de 13 metros de alto por 32,7 de ancho, 425,1metros cuadrados de lona presiden la céntrica plaza Pedro Zerolo de Madrid, en una de esas campañas cuya promoción se hace sola.
Sin mencionar explícitamente a ninguno de sus competidores, están claramente marcados los objetivos de su zasca con unas tipografías que recuerdan a Netflix, Amazon, HBO Max y Disney+. Este street marketing, aparece tras el anuncio en EEUU, del plan Basic with Ads de Netflix, que supone una cuota más económica para el usuario pero introduce publicidad.
No ha parado de ser comentada en todas las redes sociales, como Twitter o Linkedin. Los usuarios de las redes están encendidos por la valentía de la cadena de televisión al plantar cara a sus competidores.
La compañía de tecnología en pleno centro comercial Diagonal Mar de Barcelona ha colocado otro ejemplo de street marketing, que está sonando con revuelo.
Con esta campaña han conseguido promocionar el nuevo terminal 12T Pro. En esta innovadora estructura LED se pueden ver los contenidos publicitarios de diferentes destinos turísticos y culturales apoyados por diferentes personajes: músicos como las modelos Nieves Alvarez, Amaral, Dvicio o Rozalén, chefs como Jesús Sánchez o Paco Roncero y Boa, y otros artistas Mistura.
Uber está haciendo un nuevo reclamo, una evolución natural de su posicionamiento estratégico que se basa más en la improvisación. Uber quiere ser el referente del ocio local, conectando con los madrileños como un experto en la ciudad e invitando a sus usuarios a improvisar en el día a día, ya sea tras una reunión, una velada “tranquila” o una cena con amigos.
Han colocado grandes pancartas en el centro de Madrid o pantallas digitales en Callao, WiZink Center, Gran Vía o lugares de ocio. A cambio, se han tomado medidas para cerrar los lugares de entretenimiento y sugerir el próximo destino para toda la ciudad. Debemos recalcar que han hecho eco de esta campaña también en TikTok.
No podemos olvidar a los grandes expertos en montar campañas de street marketing y que causen revuelo en las redes sociales. Son los reyes de las plataformas digitales y de entretenimiento, pero también debemos considerarles reyes en campañas publicitarias que lo petan.
El éxito de la campaña de HBO para La Casa del Dragón, es uno de los ejemplos más recientes, pero nos acordamos de las impresionantes campañas de la serie de Juego de Tornos, que además publicitaban también a Vodafone.
¿Quién no se acuerda de la emblemática campaña de Netflix: ¡Oh Blanca Navidad!? La campaña de la plataforma de streaming norteamericana para la serie de Narcos, fue todo un boom entre los españoles.