¿Cuántas búsquedas realiza una persona al día en buscadores como Google? Las estadísticas cifran la respuesta en tres o cuatro consultas para un usuario promedio, pero el resultado es bastante mayor para quien se dedique al marketing o a la comunicación digital. Precisamente a los profesionales de estos ámbitos les interesa conocer el significado de una query y su utilidad en los motores de búsqueda, así como su influencia en el SEO. Por tanto, si quieres conocer en qué consiste este término o cómo puedes aprovecharlo en tu estrategia de marketing de contenido, sigue leyendo el artículo.
Una query es el término, concepto o frase que un usuario escribe en un buscador para realizar una consulta web. Por ejemplo, si una persona quiere llegar a este artículo desde Google, podría escribir en el campo de búsqueda o la barra de navegación algo así: “Qué es query” o, simplemente, “query”. Lo que aparece entre comillas es lo que denominados una query.
Puede que te estés preguntado qué diferencia hay entonces entre una query y una palabra clave o keyword. Aunque a menudo se utilicen como sinónimos, no se refieren a lo mismo. Las palabras clave son los términos que, desde el marketing, pensamos que pueden emplear los usuarios para realizar una búsqueda: es una suposición. En cambio, la query es exactamente la consulta que realiza una persona en un buscador, letra por letra.
Por ejemplo, la palabra clave de este artículo es “query”, pero a lo mejor lo que escribe alguien en Google para buscar información sobre este término es “queri”, con “i” latina. Por tanto, una query es susceptible de incluir faltas de ortografía, errores de expresión o incluso frases y preguntas completas, como puede ser: “En que cancion canta Bisbal tan dentro del alma mia”. En este último caso, la palabra clave podría ser “Bulería”, pero el usuario no la incluye en su query.
Ahora que sabemos qué es una query, podemos diferenciar entre las tres categorías que existen:
Los motores de búsqueda cada vez dan mayor importancia a la intención del usuario, que muchas veces recurre a realizar consultas por voz o utilizando las sugerencias del buscador. En este sentido, es fundamental que te adelantes a estas búsquedas y pienses cómo podría llegar una persona a tu contenido. Además de recurrir a las palabras clave, que siguen teniendo un peso indiscutible en el posicionamiento SEO, es importante conocer el comportamiento humano a la hora de consultar algo en Internet.
Para ello, es interesante incluir en tus contenidos sinónimos de la palabra clave, términos relacionados o, incluso, palabras en otros idiomas (habitualmente, en inglés) que se utilicen en relación con ella. ¿Y cómo puedo comprobar la query que escriben los usuarios para acceder a una entrada web? La respuesta la encuentras en Google Search Console, que te permite consultar “con qué frecuencia aparece tu sitio web en la Búsqueda de Google, con qué consultas de búsqueda se muestra tu sitio y con qué frecuencia los usuarios hacen clic en esas consultas”. Según los resultados, puedes adaptar tu contenido para mejorar su optimización y tenerlo en cuanta para futuras entradas.
El algoritmo de los buscadores es complejo porque el comportamiento humano también lo es. Aun así, eso no quita que sea previsible o se puedan establecer pautas para mejorar la experiencia de los usuarios con los motores de búsqueda. Por tanto, igual que Google analiza estos elementos para mejorar como empresa, tú también puedes hacerlo para obtener beneficios a largo plazo en tu estrategia de inbound marketing o de posicionamiento SEO. Veamos de qué ventajas estamos hablando: