Una auditoría de contenidos es un proceso de análisis y revisión del contenido publicado. Sirve para mejorar la estrategia de marketing realizando una evaluación sistemática de la actividad de la empresa. Su optimización mejora el posicionamiento en internet ya que se pueden detectar los factores internos (onpage) o externos (offpage) que puedan estar afectando al rendimiento del sitio web. Detectará las debilidades y fortalezas del blog o página web de la marca. Así, se obtendrá una imagen completa del rendimiento del contenido y se conocerá cuáles son las necesidades críticas o cómo actuar en futuras campañas, entre otros.
Para llevar a cabo este análisis son importantes tres elementos: usabilidad, optimización y seguridad. Recopilando información sobre estos aspectos se logrará aumentar el tráfico del sitio web, las conversiones y la rentabilidad. Este proceso es recomendable cuando se observa una bajada repentina de tráfico o un aumento inesperado pues ayudará a conocer la causa de estos comportamientos. La estrategia de contenidos es fundamental para lograr que la audiencia conecte e interactúe con la web. Por lo tanto, recopilar información útil para definir las acciones de marketing que triunfan entre los usuarios será clave para que una marca triunfe.
Objetivos de la auditoría de contenidos
- Mejorar el posicionamiento SEO.
- Conocer el contenido que triunfa entre la audiencia.
- Organizar y almacenar el contenido.
- Reciclar contenidos funcionales.
- Desechar no actualizado.
- Analizar tasas de conversión y tráfico web.
- Optimizar la estrategia de contenidos.
¿Por qué debes incorporar la auditoría de contenidos a tu estrategia?
La auditoria de contenidos ofrece una evaluación del estado de la página web desde la perspectiva del posicionamiento SEO y el contenido. Esta nos mostrará qué páginas funcionan correctamente y cuáles necesitan mejorar. Al desvelar las fortalezas y necesidades el plan de marketing se puede ajustar a las verdaderas necesidades de la empresa. Algunos de los motivos por los que incorporar la auditoria de contenidos a tu estrategia de marketing son:
- Revisar la semántica web: Desde la perspectiva más profunda del análisis, se podrán conocer las palabras clave que funcionan en tu contenido y, por lo tanto, con cuáles te debes posicionar. El uso de sinónimos o conceptos similares a las keywords aportarán mayor valor a tu sitio web. Así como la inclusión de estas en títulos y descripciones.
- Optimizar elementos visuales: Las imágenes que acompañan a tu publicación también podrán mejorar a través de la etiqueta ALT o texto alternativo. Con la auditoría de contenido se analizará su reconocimiento en los buscadores.
- Evaluar jerarquía de encabezados: Analizando el contenido detectarás si las etiquetas HTML (h1, h2, h3 u otras) se están utilizando correctamente.
Tipos de auditorías de contenidos
- Auditoría On Page: Se analizan los factores que afectan al posicionamiento de una web. Estos deben encontrarse dentro de la página de la marca. Se incluyen los elementos visuales, estructura de las páginas, enlaces y keywords, entre otros.
- Auditoría Off Page: Se ocupa de los datos que pertenecen a acciones externas a la página web: el linkbuilding.
- Auditoría SEO: Es una auditoria que precisa de conocimientos especializados sobre el SEO técnico. Se centra en corregir aspectos como la carga de la web, adaptabilidad, sitemaps o indexación.
- Auditoría UX: Estudia la experiencia del usuario evaluando los elementos que afectan en su visita a la web. Se corrigen factores como el diseño, los CTA, la adaptabilidad o publicidad invasiva.
¿Qué contenidos tiene en cuenta una auditoría de contenidos?
Dependiendo del tipo de auditoría se tendrán en cuenta unos contenidos u otros. Los que comúnmente se analizan son:
- Página principal: Se trata de la página de inicio, portada o home page. Lo primero que ve el usuario cuando se carga el navegador.
- Landing pages: También puede llamarse página de aterrizaje. Se encuentra dentro del sitio web y tiene el objetivo lograr la conversión de usuarios a leads.
- Página de categoría: Es la página de inicio de una determinada categoría. A través de ella, se enlazan las subcategorías del sitio web.
- Descripciones: Se colocan para posicionar la web en los buscadores. Sirven para resumir el contenido de una página.
- Blog de la marca: Mejoran la visibilidad de la marca en internet comunicando novedades o aportando información de valor a los visitantes.
- Correos electrónicos: El email marketing debe ser analizado para mejorar su calidad. Esto se logra adecuando el mensaje a cada usuario y comprobando si las acciones de marketing seleccionadas son las correctas.
- Ebooks: Son formatos populares en inbound marketing mediante los que se ofrece una información al usuario a cambio de sus datos. Por ello, es necesario que estén correctamente optimizados y sean de valor para el cliente.
- Redes sociales: El análisis de los perfiles en redes, conversaciones y competidores ayudará a realinear la estrategia social de marketing. Esta acción aumentará el tráfico en tu sitio web.
Cómo hacer una auditoría de contenidos
1. Define los objetivos
Para crear una auditoría de contenidos es necesario conocer los objetivos actuales de tu empresa. Es decir, saber los beneficios que se pretenden obtener o los resultados que se quieren conseguir. Estos pueden ser:
- Mejorar el SEO: Identificar páginas funcionales, analizar el contenido y comprobar si los enlaces funcionan correctamente.
- Lograr fidelización: Optimizar el contenido para mantener lograr la lealtad de tu audiencia.
- Aumentar la tasa de conversión: Dar importancia a la experiencia de usuario y lograr generar más leads.
2. Selecciona las métricas
En base a los objetivos, se deben elegir las métricas convenientes. Estas pueden ser de SEO, comportamiento del usuario, interacciones o ventas.
3. Crea un inventario
Para poder realizar una auditoría hay que tener un inventario que organice y aúne el contenido. El primer paso es recopilar las URLs de tu sitio web basándote en tu sitemap. Esto puede realizarse con distintas herramientas, por ejemplo, las que proporciona la plataforma Semrush. El segundo paso es catalogar el contenido de las URLs. Este se puede clasificar en diversas categorías dependiendo del recorrido del comprado, la tipología o el formato, entre otros. Tras esto, conviene crear una hoja de cálculo con las URLs catalogadas y sus métricas.
4. Recoge y analiza los datos
La recogida de datos puede realizarse mediante una herramienta de auditoría de contenidos. Tras esto, las cuentas deben conectarse con herramientas de análisis como Google Analytics, ContentWRX Audit o Content Square para obtener los resultados.
5. Interpreta los datos obtenidos
Examinando las métricas del contenido en conjunto se deben interpretar los datos. Se tendrán en cuenta las etapas del viaje del comprador ya que dependiendo de dónde se encuentre puede existir más tráfico, menos tasa de conversión o viceversa. En base a esto se mantendrá, eliminará o actualizará el contenido.
6. Actúa
Tras interpretar los datos, se realizará un plan de marketing enfocado a mejorar tus acciones. Se incorporarán nuevas acciones como añadir elementos audiovisuales, optimizar metadatos, arreglar enlaces internos, mejorar CTAs, etc.
Herramientas para la auditoría de contenidos
- Ubersuggest: Esta Plataforma es útil para mejorar el SEO. Ayuda a conocer cómo funciona un sitio web ingresando una URL. Ofrece una visión general y gratuita de la página web de una marca.
- HubSpot: El CMS de HubSpot identifica los puntos fuertes y débiles de la marca para optimizar la estrategia de marketing digital. Sirve para mejorar el posicionamiento orgánico de un sitio web a través de las oportunidades de mejora.
- Google Analytics: Sirve como herramienta para obtener datos sobre el rendimiento de contenidos e interacción de usuarios con la página web. Aporta gráficos detallados sobre la actividad de las acciones de marketing.