Una buena gestión de recursos humanos no será efectiva sin una buena estrategia. Estas estrategias empresariales son conocidas como las metodologías y dentro del ámbito empresarial existen varias más populares que son aplicadas por las empresas ya sea de manera individual o mediante modelos híbridos.
Entre los tipos más destacados están las metodologías ágiles, Scrum, Kanban, el modelo de ruta crítica o el modelo de cascada. Estas no son las únicas existentes, pero sí las más destacadas o populares. Lo que ocurre con estas estrategias es que la gestión de recursos humanos debe ser consciente de cómo aplicarlas de cara a la toma de decisiones programada.
La toma de decisiones basadas en datos es una de las bases de los softwares de gestión de proyectos que a través de la combinación con las metodologías obtenemos formas de aplicación mucho más competentes con la visión que tenemos de nuestra empresa.
Con esta breve introducción, en este artículo queremos enseñarte cómo tomar decisiones mediante el empleo de las metodologías ágiles en tus proyectos. ¡Sigue leyendo para saber más!
Las metodologías y la gestión de recursos humanos
Las metodologías de gestión de proyectos son enfoques sistemáticos y estructurados que guían a los equipos a través de las diferentes fases del ciclo de vida de un proyecto. Estas metodologías proporcionan un marco de trabajo para planificar, ejecutar, monitorear y cerrar proyectos de manera efectiva.
El primer paso después de seleccionar la metodología que mejor se adapte a tu proyecto y con la ayuda de herramientas que faciliten su gestión comenzamos a centralizar toda la información de especial importancia para la empresa, ya sean datos personales, información de proyectos, contratos, entre otros. En aspectos generales nos referimos a los documentos, los procesos, el estado del proyecto y todo lo relevante al mismo, cuyo principal objetivo es finalizar el trabajo con:
- El mayor nivel de calidad
- En el menor tiempo posible
- Con los recursos adecuados
- Priorizando el trabajo en equipo
Aplicar metodologías de gestión de proyectos brinda muchos beneficios tanto al proyecto como a la propia empresa, en términos de mejora de la planificación y programación de recursos para generar la mayor productividad en un tiempo efectivo.
Una gestión adecuada del proyecto aplicando la metodología idónea evita un desarrollo ineficiente tanto del trabajo como de los recursos, que quedan bien organizados gracias a la metodología aplicada.
Las metodologías de gestión de proyectos ofrecen muchas ventajas, aquí te mostramos las más destacadas.
- Mejora de la comunicación interna
- Trabajo más unido y cohesionado
- Los flujos de trabajo ayudan a crear protocolos de actuación
- Nos ofrece un proceso muy controlado, predecible y propenso a ser reproducido
- Aumento de la efectividad y rendimiento del equipo humano
En definitiva, estas metodologías de gestión de recursos humanos tienen más que comprobada su efectividad y beneficios, ya que los proyectos que las usan finalizan con un mayor éxito y el equipo trabaja con mejor foco.
El empleo de las metodologías ágiles en la gestión de recursos humanos
Con la aplicación de este tipo de metodologías alcanzaremos de manera mucho más efectiva algunos de los objetivos principales a la hora de crear una buena estructura de gestión de recursos humanos en tu empresa. Labores como estandarizar el flujo del trabajo, mejorar la comunicación interna, optimizar el uso de los recursos disponibles y tomar decisiones basadas en la información centralizada se hacen más fáciles si tenemos bien puesto el foco en las estrategias que queremos emplear.
Si nos centramos en la metodología ágil, esta tiene un marco de actuación muy amplio y se podría decir que es la más popular hasta la fecha. La metodología ágil es un enfoque de gestión de proyectos que se centra en la entrega rápida y continua de productos o servicios de alta calidad, adaptándose a los cambios en los requisitos y fomentando la colaboración y la comunicación constante entre los miembros del equipo.
Además, se basa en:
- Tener una base sólida de comunicación con un buen organigrama del equipo para conocer todos los roles. Es decir, dar protagonismo a las personas, a la colaboración y a las relaciones entre los empleados para crear proyectos competitivos.
- Establecer un presupuesto con margen de maniobra para imprevistos que puedan ocasionarse.
- Autoconsciencia de los errores. La empresa es consciente de que pueden existir fallos y pueden ser también una parte del aprendizaje, ya que las empresas siempre están en constante evolución por lo que nunca es tarde para aprender cosas nuevas.
Si se emplea de manera adecuada los proyectos que nacen de ella suelen ser de una calidad óptima, ya que al fin y al cabo es un método bastante universal donde la diferencia principal reside en la combinación adecuada con otro tipo.
La toma de decisiones y las metodologías ágiles
Cuando hablamos de la toma de decisiones basadas en datos nos referimos a aquellos resultados que obtenemos a través de los análisis efectuados por las herramientas que tenemos a nuestra disposición en la empresa.
Cuando empleamos metodologías ágiles obtenemos una automatización de los informes y un seguimiento de los KPIs adecuados que nos dan más posibilidades de ofrecer resultados más concretos en cuanto a rapidez, calidad y rendimiento, con el objetivo de ser más productivo que la competencia. Cada vez se hace más incidencia en la toma de decisiones y casi que se está exigiendo que las empresas tomen decisiones de manera mucho más rápida para responder a la demanda exigente.
En estos casos la formación del empleado es de vital importancia para que asuman riesgos y estos sean recompensados en términos económicos o de salario emocional, donde también es importante crear una cultura basada en el análisis de esa información para poder dar el salto.
Aquí aparece un término muy relevante para la toma de decisiones: los cuadros de mando. Los cuadros de mando son unos indicadores en la gestión de recursos humanos que nos ayudan a tomar decisiones de manera más rápida, por ello es muy importante que todo el equipo sea conocedor de estos indicadores para así llegar a buenas conclusiones que ayuden a finalizar los proyectos o avancen en fases clave.
En definitiva, a la hora de tomar decisiones referentes a la gestión de recursos humanos debemos formar a nuestro equipo sobre las nuevas estrategias, metodologías, indicadores y todo lo referente al análisis obtenido de nuestro proyecto. Donde una buena colaboración nos dará increíbles resultados que pueden ser aplicados en nuestro proyecto y puestos a prueba.
Con buenas decisiones sabremos adaptarnos a los cambios, mejorar la satisfacción del cliente y mejorar la visibilidad de los objetivos para todos los miembros del equipo.
Conclusión
Con la metodología adecuada podrás llevar un seguimiento y una gestión efectiva de tu proyecto. Una vez conocidos es hora de elegir el que más encaje en tu equipo, proyecto y la empresa en general. En un entorno empresarial dinámico, la capacidad de adaptarse y aprender de manera continua sigue siendo esencial para el éxito a largo plazo.
Para ello, una buena forma de gestionar efectivamente los proyectos de tu negocio es implementando un software de gestión empresarial como Dayfice. El ERP de Occam Agencia Digital con el que puedes automatizar los procesos rutinarios, controlar los turnos y horarios, realizar valoraciones de desempeño y, por supuesto, gestionar de la manera más productiva todos los proyectos, favoreciendo la centralización y la comunicación de la empresa.
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